SM el Rey Mohammed VI dirigió este viernes 06/11/2015 un discurso a la nación con motivo de la conmemoración del 40 aniversario de la gloriosa Marcha Verde.
He aquí el texto íntegro del discurso Real:
"Loor a Dios, la oración y el saludo sean sobre nuestro señor Enviado de Dios, su familia y compañeros.
Querido pueblo,
La celebración del cuadragésimo aniversario de la Marcha Verde no es un acontecimiento ordinario ni una celebración pasajera, más bien queremos que constituya un antes y un después dentro de la historia de la culminación de la integridad territorial del Reino.
En efecto, tras la epopeya de la liberación del territorio y el afianzamiento de la seguridad y estabilidad, nuestro país ha obrado por aportar a los hijos del Sáhara los elementos que permiten una ciudadanía completa y las condiciones de una vida libre y digna.
Después de 40 años, con todo cuanto supusieron como hechos positivos y negativos, hoy queremos marcar una verdadera ruptura con las prácticas adoptadas en el tratamiento de los asuntos del Sáhara; una ruptura con la economía rentista y los privilegios, así como con la débil iniciativa privada. También una ruptura con la mentalidad del centralismo administrativo.
Nos podemos preguntar, ¿por qué justamente hoy, después de 40 años?
Efectivamente, tras años de sacrificios y esfuerzos políticos y de desarrollo, alcanzamos la etapa de madurez.
Además, hemos dispuesto las condiciones para poder emprender una nueva etapa por el camino del afianzamiento de la unidad nacional y completa integración de nuestras Provincias del Sur en el seno de la Madre Patria.
En este contexto, se enmarca la puesta en marcha del modelo de desarrollo de las Provincias del Sur, así como la aplicación de la regionalización avanzada.
Querido pueblo,
Nos empeñamos en aportar a los hijos de nuestras Provincias del Sur los medios necesarios para administrar sus asuntos y poner de relieve sus capacidades de promover el desarrollo en la zona.
Los saharauis, desde siempre fueron reputados como gente de comercio y de ciencia, que viven de su trabajo, con dignidad y altivez, sin esperar asistencia de nadie, a pesar de las duras condiciones.
Nos referimos a los verdaderos hijos del Sáhara; a los verdaderos patriotas que han permanecido fieles a los vínculos de la pleitesía que, lo mismo que a sus antepasados, les ha unido a los soberanos de Marruecos a través de la historia.
En cuanto a aquellos que se dejan llevar por las tesis de los enemigos, que luego van difundiendo, a pesar de su escaso número, no tienen cabida entre nosotros. Sin embargo, quien recapacita y retoma el camino correcto, hallará siempre la Patria clemente y misericordiosa.
Querido pueblo,
La aplicación del modelo de desarrollo de las Provincias del Sur viene a plasmar la fidelidad que mantenemos a Nuestros compromisos hacia los ciudadanos de las Provincias del Sur, haciendo de estas últimas un modelo de desarrollo integrado.
También aspiramos a convertirlo en un pilar que afiance la integración definitiva de dichas provincias en el seno de la Nación unificada, consolidando el resplandor del Sáhara en tanto que centro económico y punto de enlace entre Marruecos y su profundidad africana.
Por ello, Hemos decidido, con la ayuda de Dios, movilizar todos los medios posibles para realizar grandes obras y proyectos sociales, sanitarios y educativos, en las regiones de Laayún-Seguia El Hamra, Dajla-Wad Eddahab y Guelmim-Wad Nun.
En el ámbito de las infraestructuras se llevará a cabo el refuerzo de la red vial en la zona, realizando una autovía, según los estándares internacionales, entre Tiznit, Laayún y Dajla.
Paralelamente, invitamos al gobierno a reflexionar en torno al establecimiento de un eje para el transporte aéreo en las Provincias del Sur, con destino a África.
También albergamos el sueño de construir una línea ferroviaria desde Tánger a Lagüira, con el fin de enlazar Marruecos con el resto de África. Rogamos a Dios que nos ayude para poder reunir los recursos financieros de los que carecemos ahora, para completar la línea que enlaza Marraquech con Lagüira.
Por otra parte, tenemos la intención de llevar a cabo la construcción del gran puerto atlántico de Dajla y llevar a la práctica grandes proyectos de energía solar y eólica en el sur, así como conectar la ciudad de Dajla con la red eléctrica nacional.
Es una ambición Nuestra la de comunicar estas redes e infraestructuras con los países africanos, a fin de contribuir a la promoción de su desarrollo.
En este sentido, y convencidos de que las infraestructuras no son suficientes en sí para mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos, nos empeñamos en seguir adelante con la promoción del ámbito económico, apoyándolo mediante proyectos de desarrollo humano.
En este contexto queremos insistir sobre el hecho de que hay que seguir invirtiendo los ingresos de las riquezas naturales en beneficio de los habitantes de la zona, en un marco de consulta y coordinación con los mismos.
Con este objetivo, Hemos decidido llevar a cabo un conjunto de proyectos que van a permitir una valorización y aprovechamiento de los recursos y productos locales, como pueden ser el macroproyecto de desalación del agua del mar en Dajla y el establecimiento de unidades y polígonos industriales en Laayún, Marsa y Bojador.
Estamos muy empeñados en reforzar estas iniciativas estableciendo un marco legal que estimule la inversión y permita al sector privado, tanto nacional como extranjero, una visibilidad y unas condiciones de competitividad, con el fin de contribuir al desarrollo de la zona.
De igual modo, se creará un fondo para el desarrollo económico que tendrá por función el desarrollo del tejido económico y apoyar las empresas y la economía social, que generen ingresos estables y oportunidades de empleo, particularmente para los jóvenes.
Querido pueblo,
Realmente nos importa preservar la dignidad de los hijos del Sáhara, particularmente cuando se trata de los jóvenes, arraigando el amor que hacia su patria sienten y los lazos que a la misma los unen.
Por ello, Hemos orientado al gobierno para que reestructure el régimen de asistencia social, en busca de mayor transparencia y equidad, en el seno del compromiso con los principios de igualdad y justicia social, reivindicados por la mayoría de los sectores concernidos.
Además, dada la importancia sentimental que la cultura hassaní representa para los hijos del Sáhara, obramos por consolidar los mecanismos de preservación y divulgación del patrimonio saharauí, sobre todo a través de la construcción de teatros, museos y casas de la cultura en las tierras del sur.
En lo que respecta al ámbito de los derechos humanos, Marruecos, gracias a Dios, ha conseguido hacer frente a las maquinaciones de los enemigos de nuestra nación, merced a la movilización colectiva, a la gobernanza securitaria y a la apertura sobre los actores de la sociedad civil.
De igual modo, el Consejo Nacional para los Derechos Humanos, con sus comisiones regionales, en tanto que institución constitucional para la protección y defensa de los derechos y libertades, está tratando cualquier exceso, con total independencia, en el marco del diálogo y la cooperación con los poderes públicos, instancias asociativas y ciudadanía.
Querido pueblo,
Con la aplicación de la regionalización avanzada, Marruecos no hace sino reforzar su credibilidad y confirmar su fidelidad a sus compromisos.
Como bien dije en mi Discurso ante el parlamento, la legalidad democrática y popular, conseguida por los electos, hace de los mismos verdaderos representantes de los habitantes de las Provincias del Sur, tanto en lo que se refiere a las instituciones nacionales como a sus relaciones con la comunidad internacional.
En este sentido, y con el fin de materializar nuestro empeño de hacer que las Provincias del Sur sean pioneras en la aplicación de la regionalización avanzada, vamos a asistir al establecimiento de contratos-programas entre el Estado y las regiones, con el fin de fijar los compromisos de cada parte con relación a la realización de los proyectos de desarrollo.
Con este propósito, invitamos al gobierno a acelerar la puesta en marcha de las disposiciones legales relativas a la transferencia de competencias del centro a estas regiones, apoyándolas mediante el traspaso de los recursos humanos y materiales necesarios, en espera de generalizar esta experiencia a las demás regiones del Reino.
Por otra parte, se ha de acelerar la elaboración de una verdadera Carta de desconcentración administrativa, que conceda a los servicios regionales las competencias necesarias para la administración de los asuntos regionales, a escala local.
En este sentido, queremos insistir igualmente en la necesidad de implicar a los ciudadanos, poniendo a su disposición espacios y mecanismos permanentes para el diálogo y la consulta, del modo que les permita apropiarse los programas y participar en su ejecución.
De este modo, pondremos a los habitantes de nuestras Provincias del Sur y sus representantes ante sus responsabilidades, sobre todo tras haberles facilitado los mecanismos institucionales y de desarrollo, para la administración de sus asuntos, y respondido a sus necesidades.
Querido pueblo,
Marruecos cumple sus promesas, de palabra y de hecho. Además, sólo se compromete cuando tiene la certidumbre de que va a cumplir.
Por ello, queremos transmitir un mensaje al mundo: nosotros no enarbolamos lemas hueros, ni tampoco vendemos ilusiones, como hacen otros; todo lo contrario, ofrecemos compromisos que cumplimos y realmente aplicamos.
Marruecos se ha comprometido a aplicar la regionalización avanzada, cosa que ahora es una realidad palpable, con sus instituciones y competencias.
Marruecos ha prometido la democracia y la administración de los asuntos locales por los propios habitantes de las Provincias del Sur. Helos ahora eligiendo a sus representantes y participando en las instituciones locales, con total libertad y responsabilidad.
Marruecos también se ha comprometido a poner en marcha un particular modelo de desarrollo para sus Provincias del Sur. Ahora lanzamos obras estructurales y proyectos que generan ingresos y oportunidades de empleo.
Marruecos se ha comprometido a garantizar la seguridad y estabilidad; hoy, el Sahara marroquí es una de las zonas más seguras de la región del Sahel y el Sáhara.
Si ahora Marruecos se compromete a hacer del Sáhara marroquí un centro de intercambio y un eje de comunicación con los países del África subsahariana, disponiendo las infraestructuras necesarias para ello, sin lugar a dudas, hará nuevamente honor a sus promesas, ante la enorme decepción y amargura de sus enemigos.
En cambio, los habitantes de Tinduf, en Argelia, siguen padeciendo el hambre, la desesperación y la privación, además de la violación sistemática de sus derechos fundamentales, lo que legítimamente incita a preguntarse:
¿Dónde han ido a parar los cientos de millones de euros que se ofrecen como ayudas humanitarias, que llegan a superar los 60 millones anuales, sin contar los miles de millones destinados al rearme y apoyo del aparato propagandístico y represivo de los separatistas?
¿Cómo se puede explicar el sórdido y exagerado enriquecimiento de los dirigentes separatistas, que poseen bienes inmobiliarios, cuentas y depósitos bancarios en Europa y América Latina?
Además, ¿no se explica que Argelia no haya hecho nada por mejorar la situación de los habitantes de los campos de Tinduf, cuyo número, como máximo, no superaría 40 mil personas, o lo que equivaldría a un barrio mediano de Argel?
O sea que a lo largo de 40 años Argelia no ha podido, o no ha querido, procurar a estos habitantes unas 6000 viviendas, es decir, un promedio de 150 viviendas anuales, para vivir dignamente.
¿Cómo puede Argelia dejar a los habitantes de Tinduf en esta dramática e inhumana situación, cuando se permite gastar miles de millones en su guerra militar y diplomática contra Marruecos?
La historia juzgará a aquellos que han hecho de los libres y honrados habitantes del Sáhara, unos pordioseros de las ayudas humanitarias.
También se registrará que hayan explotado el drama de un grupo de mujeres y niños del Sáhara, convirtiéndolos en botín de guerra y capital de un comercio ilícito, así como en instrumento de pugna diplomática.
No quiero dejar de dirigirme a los habitantes de los campos de Tinduf y preguntarles: ¿Acaso estáis satisfechos de la dramática situación que estáis viviendo? ¿Aceptan las madres los sentimientos de desesperación y frustración que embargan a sus hijos, viéndose en un callejón sin salida?
A mí en absoluto me agrada vuestra inhumana situación. Ahora bien, si vosotros la aceptáis, no reprochéis nada a nadie; sobre todo viendo que Marruecos está desarrollando sus Provincias del Sur y procurando la dignidad y vida libre a sus habitantes.
Querido pueblo,
La cuestión del Sahara no es el primer problema al que Marruecos se haya enfrentado a lo largo de su historia. Nuestro país conoció momentos de anarquía y caos, vivió bajo el protectorado y la colonización, y fue igualmente escenario de conflictos y desavenencias tras la independencia, en torno a la manera de concebir la edificación del Estado moderno.
Pero siempre consigue superar las situaciones difíciles, saliendo de las mismas unido, fuerte y airoso. Todo ello gracias a la fe que anima al pueblo marroquí en la unidad de su destino, y a la defensa de sus valores sagrados y de su integridad territorial, amén de su sólida adhesión a su Trono.
Al decidir poner en marcha la regionalización y el modelo de desarrollo, Marruecos quiere ofrecer más posibilidades para hallar una solución definitiva al conflicto artificial en torno a nuestra integridad territorial.
Convencido de la justicia de su causa, Marruecos respondió en 2007 al llamamiento de la comunidad internacional consistente en presentar propuestas para salir del callejón sin salida en el que se hallaba la cuestión.
De este modo, presentamos nuestra Iniciativa de autonomía para las Provincias del Sur, que la comunidad internacional considera como seria y digna de credibilidad.
Tal y como dije con ocasión del Discurso de la Marcha Verde del año pasado, esta iniciativa constituye lo máximo que Marruecos puede ofrecer. Además, su aplicación queda supedita a la consecución de una solución política definitiva, en el marco de las Naciones Unidas.
Así pues, se equivoca quien espera de Marruecos otra concesión, ya que lo ha dado todo: vidas de sus hijos en defensa del Sáhara.
¿Acaso debemos presentar más concesiones, tal y como desean algunas organizaciones internacionales y ONG?
Bien conocemos el trasfondo de estas posiciones hostiles, que no buscan sino dividir el país, del mismo modo que sabemos que no tienen el derecho de inmiscuirse en los asuntos de Marruecos.
Este mismo principio es el que rige nuestro comportamiento respecto a algunos círculos en las organizaciones internacionales que, desconociendo la historia de Marruecos, intentan presentar unas concepciones nada realistas, urdidas dentro de oficinas climatizadas, en tanto que propuestas para hallar una solución al diferendo regional en torno al Sahara marroquí.
Marruecos rechaza cualquier aventura de consecuencias imprevistas, con graves repercusiones futuras, o cualquier propuesta infundada e ineficaz, con las que únicamente se pretende frenar la dinámica positiva lanzada por la iniciativa de autonomía.
Nuestro país afrontará igualmente las campañas hostiles dirigidas contra los productos económicos marroquíes, animado por el mismo espíritu de sacrificio y compromiso con el que obra en los ámbitos político y securitario, en defensa de su unidad nacional y valores sagrados.
No obstante, aquellos que quieran boicotear estos productos, en violación del derecho internacional, que lo hagan, pero que también asuman la responsabilidad de sus decisiones.
Pero Marruecos tiene el derecho de abrir sus puertas ante sus socios, ya sean países o empresas mundiales, para que puedan aprovechar las oportunidades de inversión que la región ofrecerá, gracias a los grandes proyectos que serán lanzados.
Dado que para nosotros no existe distinción alguna entre las regiones del norte y del sur del Reino, por lo tanto, no hacemos ninguna diferencia entre los tomates de Agadir y de Dajla o entre las sardinas de Larache y de Bojador, tampoco entre los fosfatos de Joribga y de Bucraa, a pesar de que estos últimos representen menos del 2% de las reservas nacionales, según confirman los datos mundialmente reconocidos.
Con idéntico rigor y determinación, Marruecos hará frente a todas las tentativas que buscan poner en duda el estatuto jurídico del Sahara marroquí, o su derecho de ejercer su plena autoridad sobre su territorio, tanto en sus provincias del sur como en el norte.
Ello requiere que todo el mundo redoble los esfuerzos y continúe la vigilancia y movilización con el fin de dar a conocer nuestra justa causa y el desarrollo que conoce nuestro país, haciendo frente a las maniobras de los enemigos.
Querido pueblo,
Nos incumbe a todos la responsabilidad de promover el desarrollo de nuestras Provincias del Sur, salvaguardar la dignidad de sus hijos y defender la integridad territorial del país, con el mismo espíritu de compromiso y sacrificio que caracterizó la Marcha Verde.
He aquí la mejor prueba de lealtad al espíritu de su artífice, Nuestro Venerado Padre, Su Majestad el Rey Hassan II, Dios le tenga en su Gloria, y a la memoria de los virtuosos mártires de la Nación.
El saludo, la bendición de Dios el Altísimo y sus gracias sean con vosotros."